Con altas velocidades tanto de lectura como de escritura, las unidades SSD DuraFlash para uso industrial se dividen en tres modelos de distinto formato, y también con distinta capacidad.
SMART Modular Technologies, especialista en soluciones de memoria para aplicaciones industriales con más de tres décadas de experiencia, anuncia la expansión de su familia de productos SSD ME2 SATA de la serie DuraFlash con opciones M.2 2242, mSATA y Slim SATA.
Orientadas a una amplia gama de aplicaciones, las unidades de almacenamiento DuraFlash resultan idóneas para soluciones de computación embebida, transporte, dispositivos médicos, y aplicaciones industriales que requieren bien factores de forma SSD legacy, o bien de inferior tamaño. Además, complementan los actuales formatos M.2 2280 y de 2,5”.
Así, las nuevas unidades SSD DuraFlash para uso industrial de SMART se construyen a partir de la tecnología NAND 3D de triple nivel de celdas (TLC), y se encuentran disponibles con soporte de temperatura operativa tanto comercial (de entre 0 y +70 grados centígrados) como industrial (de entre -40 y +85 grados).
Mediante la incorporación de la funcionalidad de detección y corrección de errores de tipo LDPC (Low Density Parity Check), la familia ME2 proporciona una integridad y fiabilidad mejoradas, además de protección del camino de datos de extremo a extremo.
Software funcional en los SSD
Las tres nuevas unidades que ha lanzado SMART integran el firmware NVMSentry, el cual combina funcionalidades tanto para la personalización como para la optimización del rendimiento del producto. El algoritmo del firmware puede ajustarse para cuadrar perfectamente con el rendimiento requerido para las necesidades de la aplicación, además de poder contar también con funcionalidades a ser añadidas, incluyendo entre estas la capacidad de borrado seguro.

También se distribuyen en una variedad de capacidades; el modelo de formato M.2 2242 puede ir desde los 240 GB hasta los 960 GB, además de proporcionar una velocidad de 560 MB/s, y de escritura de 500 MB/s.
Por lo que respecta a los formatos mSATA y Slim SATA, ambos presentan capacidades que parten también de los 240 GB, para llegar hasta los 1.920 GB, con unas velocidades que igualan al formato M.2 en la lectura (560 MB/s), pero que lo superan en lo que respecta a la velocidad de escritura con 520 MB/s.
Para los interesados, os dejo el enlace a la web en donde encontrar todo el portfolio de estos SSD industriales.