Con soporte para los microprocesadores Cascade Lake de Intel y Rome de AMD, estas memorias industriales DDR4 para usos diversos están preparadas para operar en servidores de alto rendimiento.
La taiwanesa Apacer anuncia que es la primera fabricante que presenta un catálogo completo de memorias DDR4-3200 para servidores con clasificación de uso que las hace válidas para entornos y aplicaciones industriales.
Estos módulos DRAM ofrecen soporte para poder trabajar con la última hornada de microprocesadores Cascade Lake de Intel y Rome de AMD, pensados para su uso en plataformas de servidores de alto rendimiento.
Este tipo de operativa, cada vez más demandada debido al incremento de las transmisiones, exige una capacidad de trabajar 24/7, algo que las nuevas memorias DDR4 para uso industrial a 2933 y 3200 MHz toleran proporcionando estabilidad a largo plazo incorporando circuitos integrados DRAM originales de grado superior.
La misma compañía fabricante también ofrece en su catálogo módulos de memoria DRAM con capacidad anti-sulfuración (patentada), los cuales son idóneos para la protección de los dispositivos en el borde de la red (edge) que se ven sometidos a operar en entornos con una gran polución.
Modelos de memorias industriales DDR4
En principio, la nueva memoria Apacer DDR4-2933 y DDR4-3200 de grado industrial se encuentra disponible en los formatos UDIMM, SODIMM, RDIMM, ECC UDIMM, y ECC SODIMM con capacidades de 8 y 16 GB.
Además de las arquitecturas de chips anteriormente indicadas, estas nuevas memorias industriales también son compatibles con la serie de procesadores Ice Lake de Intel, y Ryzen 3000 (con chipset X570) y Ryzen Embedded V1000.
El rango de temperaturas operativas que aguantan depende de cada modelo concreto, pero en general va desde los 0 hasta los +95 grados centígrados, y las memorias presentan una conexión de 288 patillas para el formato UDIMM y de 260 para el formato SODIMM.
Las primeras muestras de memorias industriales DDR4 estarán disponibles y podrán ser entregadas en el último trimestre de este mismo año y, en el primero del año que viene, empezará la producción en masa.