El convertidor de formatos de vídeos presentado por el distribuidor, facilita la integración entre diferentes tecnologías.
Conforme los equipos de vídeo actuales se van integrando en las plataformas aeroespaciales, así como de defensa aerotransportada o terrestre, los desarrolladores de dichos sistemas se van enfrentando a un problema clave: convertir los vídeos más antiguos heredados para que nuevos sistemas puedan trabajar con ellos.
Y es que, para crear una mejor situación de la zona vigilada, se están agregando más cámaras y sensores, por lo que es muy común la convivencia entre estos nuevos sistemas con aquellos más antiguos. Conscientes de ello, desde la empresa Curtiss-Wright, empresa que opera en el territorio español y Portugal gracias a la empresa Donalba, ha creado un convertidor de formatos de vídeos cuyo objetivo es facilitar la integración, el RVG-FC1.
Este práctico equipo proporciona una solución simple pero potente, siendo capaz de convertir una amplia gama de formatos de vídeos y resoluciones. Las características SWaP están presentes en él, ya que es una unidad pequeña (49x160x185 mm) y pesa tan solo 1,1 kg, por lo que se puede emplear en cabinas e interiores de helicópteros y vehículos terrestres. Además, la unidad admite hasta 15 de los formatos de vídeos más comunes que se encuentran en aplicaciones de defensa y aeroespacial.
Normativas en el convertidor de formatos de vídeos
Su construcción fue pensada para cumplir con el estándar DO-160 referente al rango de temperaturas de funcionamiento de equipos de aviónica, así como golpes, vibraciones y otro tipo de amenazas. Esto lo convierte en el único convertidor de vídeo del mercado lo suficientemente rugerizado para actuar de manera óptima incluso en las aplicaciones y ambientes más exigentes.
Por último, cabe mencionar que su uso es ideal para agregar conversión de formato de vídeo en plataformas de video digital a bordo de plataformas aéreas, tanto tripuladas como no tripuladas.
